Ricardo Arjona, show con un toque urbano

En el primero de los seis conciertos que dará en el Auditorio Nacional, que casi llenó, el guatemalteco recurrió a una escenografía completamente citadina.

Diferente. Esa es la palabra que mejor define el espectáculo que Ricardo Arjona ofreció a los casi 10 mil asistentes al Auditorio Nacional la noche del jueves, en lo que fue su primer concierto de los seis que ofrecerá en el recinto de Reforma, como parte de su tour 5to piso.

Siempre controversial, pues aunque muchos critican su estilo, letras, comportamiento y hasta forma de actuar, lo cierto es que Arjona tiene muchos seguidores que casi llenaron ese recinto, pese a los problemas viales que se sucedieron ese día.

El cantautor guatemalteco dispuso del escenario como si fuera set cinematográfico, con una escenografía que semejaba un barrio citadino, muy similar a lo que se ve en la televisión en series como Friends.

Había un bar, una barbería, azoteas y, al fondo, una pantalla que unas veces servía como edificio con varios pisos, otras daba acercamiento a un balcón, o daba movimiento a un elevador, o bien era la continuación de la calle, todo según las necesidades del show.

En punto de las 20:35 horas, los ánimos se empezaron a calentar con el cantante y productor Tommy Torres, quien interpretó Pegadito, Imparable y Tarde o temprano, acompañado sólo de su guitarra y un pianista.

Al terminar su participación, el público no paraba de gritar Arjona, Arjona, mientras los nueve músicos que componen su banda se acomodaban en diversos puntos de la escenografía: dentro del bar, la barbería, la azotea, la calle.

Al fondo se veía en la pantalla cómo el elevador bajaba mientras se escuchaba 5to piso; acto seguido, Ricardo Arjona aparecía vestido de mezclilla, con una camisa azul y unos cómodos tenis, haciendo que el púbico materialmente enloqueciera y los gritos hicieran casi inaudible dicho tema.

“El primer verso de esta canción es como lo que nosotros los hombres quisiéramos decirle a las mujeres … ‘Me gusta verte en cueros’…”, fueron las primeras palabras del cantante para arrancar con Desnuda.

Así siguieron El del espejo, Acompáñame a estar solo, Sin ti , Taxi, Que nadie vea, Dime que no y Quiero. Entre tema y tema, el guatemalteco invitaba a cantar al público, mientras observaba con una sonrisa cómo los asistentes se desvivían por completar las estrofas.

“México, buenas noches, está es una celebración, el asunto se está poniendo jodido, mientras los periódicos dicen que una terrible enfermedad con epicentro aquí (haciendo referencia a la influenza humana), pone de cabeza al mundo, nos damos cuenta que no pasa nada y estamos aquí, celebrando”, comentó arrancando los aplausos de los presentes.

Más adelante siguió con uno más de los múltiples discursos que dio y el cual provocó risas: “No es tan malo estar jodido; si fuera así, los gringos que hace 35 años no lo dejaban subir al camión, ahora no lo hubieran hecho Presidente”, comentó antes de cantar Si el norte fuera el sur.

Además, de manera virtual, Arjona hizo un dueto con Paquita la del Barrio, quien desde una pantalla en lo alto de un balcón interactuaba con él para cantar el tema Ni tú ni yo, con acordes de mariachi. Al final, Paquita apareció abajo, junto a Arjona gracias a una de las múltiples pantallas que tenía en el escenario.

Durante dos horas de show y despliegue de recursos técnicos, se escucharon 22 temas. En punto de las 23:00 horas, el recital se acabó luego de que Arjona saliera dos veces más a despedirse. Por supuesto, el cierre fue con Mujeres.

“México... Muchas gracias... Gracias”, fueron las palabras de despedida del intérprete, antes de desaparecer tras una de las puertas de la escenografía.

Fuente: Eva Díaz Moreno
Excélsior - D.F., Mexico