El concierto de Ricardo Arjona comenzó anoche con la simulación de que éste cantaba desde el quinto piso de un edificio de apartamentos, que en realidad era una imagen que se proyectaba en una pantalla gigante en el fondo del escenario del Coliseo de Puerto Rico. Luego de interpretar la canción que le da nombre a la gira que lo trae una vez más a la Isla, Quinto piso, se proyecto en esa misma pantalla un ascensor en el cual “descendía” el artista hasta que apareció en tarima.
El cantante guatemalteco lució el mismo look que nos tiene acostumbrados: mahones, camisa y chaqueta de tonos sobrios. Un aspecto que aparenta descuido pero en el que todo está en su lugar.
En su primera alocución con el público, Arjona filosofó sobre las posibilidades que ofrece la vida “cuando se está jodido”.
“No es tan malo estar jodido, porque cuando se está bien jodido no hay otro camino que estar mejor”, dijo arracando carcajadas de los presentes.
Acompañado por una banda de nueve músicos, Arjona se presentó en medio de un montaje impresionante. La escenografía simulaba un callejón urbano con semáforos y puertas de garaje. Imágenes proyectadas complementaban los temas interpretados por el artista, mientras actores dando vida a personajes característicos de una ciudad, se paseaban por el escenario .
La función de anoche sería la primera de dos (la segunda sería hoy) que el cantautor realizaría este fin de semana en el Choliseo, que lució lleno en su versión mediana.
Primera Hora - Puerto Rico
Cristina del Mar Quiles / Para Primera Hora
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