sábado, 19 de diciembre de 1998

ALMA DE MENTIROSO

Ricardo Arjona asegura ser mentiroso y amar la irresponsabilidad

Evelyn Ugalde
Redactora de La Nación

Su hablar pausado y metafórico nos acompañó a lo largo de los 15 minutos en los que el cantautor de Mentiroso, Señora de cuatro décadas, Mujeres y cientos de composiciones más, comentaba con historias su propia vida.

Disimulando su deseo de estar en otra parte, agradeciendo la oportunidad de promocionar su último disco Sin daños a terceros y olvidando que afuera lo esperaban unos cincuenta periodistas para la conferencia de prensa, Ricardo Arjona accedió a hablar de todo menos de su vida privada.

o solo la chaqueta de cuero negro que vestía develaba un aire rebelde, también su rígida sonrisa, que le brotaba en muy pocas ocasiones en el rostro. El movimiento de sus manos contrastaba con la mirada atenta que en los momentos de más énfasis brillaba cuando alguien dice una mentira o una verdad experimentada.

Al iniciar, algo dulce jugueteaba en su boca, era un confite de menta que a pesar de su simpatía estorbaba en la conversación que Arjona protagonizó. Con cortesía pidió disculpas, lo sacó de la boca y empezó la entrevista:

-¿Porqué dice que Sin daños a terceros es un disco más íntimo?

Los discos son de dos tipos: de la piel para adentro o de la piel hacia fuera. Si el norte fuera el sur es de la piel hacia fuera, porque desempeñé el papel de cronista, investigador o víctima del entorno. Sin daños a terceros es más de la piel para adentro, es buscar cosas dentro de mí, retomar cosas que estaban allí, y al mismo tiempo recordar las cosas más interesantes de mis inicios. Ubicarme en un estudio sencillo y pequeño, para que fuese más importante la creatividad que la tecnología, tratar la manera de hacer un disco con mucha más libertad, no con la compañía disquera sino conmigo, poder jugar y administrar mejor la libertad.

-¿Está contento con el resultado de este último disco?

-El resultado de los discos lo miden las compañías disqueras con la cantidad de discos vendidos, yo lo mido por lo que me divertí haciéndolo y por lo satisfecho que quedo cuando lo termino. Creo que uno de los mejores discos en lo que es sonido y producción fue Si el norte fuera el sur, pero Sin daños a terceros me unió más con el lado del corazón, con músicos que al tocar un instrumento están sintiendo.

-¿Porqué las mujeres deben decir que no cuando quieren decir que sí?, ¿No le parece un pensamiento machista?

-No, yo creo que la canción Dime que no es un juego erótico, subterráneo de parte mía. Yo creo que es como la invitación dime que no para emocionarme un poquito más, como ese juego erótico del castigo, tan extraño pero tan sofisticado en cuestiones de sentir.

-¿En el proceso de la composición que papel juega la razón y las emociones?

-Yo le hago un poquito mas de caso a las emociones, tanto en la composición como en la vida, en la composición de repente no te va tan bien pero no te arrepientes menos. En la vida cuando te dejas llevar por la razón planificas tanto, piensas tanto que cuando te equivocas te duele mucho más. Cuando amas a alguien sin pensar de puro corazón y te fue mal te queda la satisfacción de haberte entregado completamente. En el campo de la composición los sentimientos son fundamentales, nosotros no vendemos un pedazo de metal con canciones adentro, vendemos emociones. Si uno pretende emocionar, debe estar emocionado con lo que hace.

-Realmente cree que mentir es una forma de decir te quiero?

Yo creo que sí, creo que nos sirve a todos por más que nos queramos gastar el papel de que somos absolutamente sinceros, debemos entender que a nadie en este planeta de imperfectos le conviene ser completamente sincero porque va a parar hiriendo a muchos o siendo un ermitaño porque vivimos un poco de la mentira. Cuando nos enamoramos idealizamos tanto a la persona que la vemos como perfecta y ninguna persona es perfecta. La única manera de mantener esa esfinge de perfección es depender un poco de la mentira.

-¿Que extraña de la época de músico ambulante?

-La irresponsabilidad, yo amo la irresponsabilidad, la extraño más que nada en el mundo, por eso de repente tengo ráfagas de irresponsabilidad y me encanta porque me reencuentro con ese tiempo en el que más canciones escribía y las hacía con más facilidad porque estaba en más contacto con las cosas.

Diciendo mentiras

La más grande mentira que ha dicho: Dije "te quiero" sin sentirlo

La más grande mentira que le han dicho: esa misma

La que le ha escuchado a un político: ayy... es que son tantas, no nos alcanzaría esta entrevista para contarlas.

La que le decía a su mamá: A mi madre le decía mentiras para mantenerla tranquila y lo que lograba era mantener mi conciencia intranquila.

Fuente: COSTA RICA, La Nación Digital, Revista Viva.

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